EL GOBIERNO presidido por la persona que escojan los colombianos el próximo domingo debe implementar una política antidrogas radicalmente diferente a la actual, le manifestó ayer a los medios el ex mandatario César Gaviria.“Primero”, expresó, “necesitamos una política de consumo distinta, más acorde con las nuevas tendencias internacionales; inclusive con las propias políticas de Estados Unidos”.
“Y segundo, yo creo que Colombia tiene derecho, como lo tiene México, para hablar internacionalmente más duro, para que no solamente la comunidad internacional le exija a Colombia, sino que nosotros le exijamos a la comunidad internacional que haga lo propio”, consideró el ex presidente liberal.
“Nosotros sabemos mucho de lucha contra los carteles de la droga, pero evidentemente sabemos poco de consumo”, anotó.
“Lo que sí es claro, es que Latinoamérica”, en general, “y Colombia, y Brasil, y México y todos, tenemos que desarrollar nuestras propias políticas de consumo diferentes de las de los americanos, diferentes de las de los europeos”, argumentó.
En ese sentido, Gaviria consideró que “la prevención hay que entregársela a la sociedad civil. El gobierno no lo hace bien manejando campañas de prevención, sino de manera muy ocasional. Medir las políticas que están en práctica, así sean del gobierno, tiene que ser la función de alguien distinto al propio gobierno. Los gobiernos no son buenos para medir la eficacia de sus políticas ni lo hacen con profesionalismo, ni nosotros tenemos estadísticas suficientemente buenas”.
Y allí, el ex gobernante expuso como es información lo que más hace falta para poder hacer los cambios que requiere la política antidrogas.
“Uno de los grandes problemas que tiene la política frente a las drogas es la ausencia de información. La poca información que hay y la que se consigue es poco fiable, muy poco fiable. El gran sacrificado, cuando uno aborda el tema de las drogas, es la información”, dijo.
“No hay. ¿Y por qué no hay información? Primero, porque las políticas contra las drogas siempre han partido de principios. No de la práctica. No de la calidad de las políticas. No de medir si las políticas funcionan, sino de principios. Y eso es algo que ha terminado haciendo un enorme daño”, declaró Gaviria.
El dirigente risaraldense planteó cómo, “tal vez, la experiencia más clara es Estados Unidos. Estados Unidos, por equis razones, se metió en el prohibicionismo como política general, más basados en principios que en cualquier otra cosa.
Y en realidad no es que la política haya fallado, que de hecho ha mostrado enormes limitaciones”, como que “ellos no han logrado reducir el consumo, sino que no han sido capaces de desarrollar políticas alternativas, cosa que si han logrado hacer los países europeos, que se aplicaron a una política que se llama reducción de daño, que consiste en aplicar las políticas que menos daño le hagan a la sociedad”.
“Allí se llega cuando uno dice esto no es solo un problema de principios”, sino que “esto es un tema de saber si las políticas funcionan o no funcionan”, precisó.
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