sábado, 29 de mayo de 2010

Candidatos hablaron sobre chuzadas y corrupción


SOBRE LAS interceptaciones y seguimientos ilegales realizados por el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) y la corrupción hablaron anoche los candidatos presidenciales durante el último debate televisado, a través del Canal Caracol, antes de las elecciones.

Los aspirantes Antanas Mockus, del Partido Verde; Juan Manuel Santos, del Partido Social de Unidad Nacional (La U); Noemí Sanín, del Partido Conservador; Gustavo Petro, del Polo Democrático; Rafael Pardo, del Partido Liberal; y Germán Vargas, de Cambio Radical; aceptaron confrontar sus posiciones frente a los escándalos que han rodeado al actual gobierno.

Contratistas

El tema de la corrupción se enfocó sobre algo concreto: la posibilidad de que contratistas del Estado estuvieran participando en la financiación de las campañas.

Todos los candidatos negaron tener ese tipo de apoyos financieros.

Santos puntualizó que su campaña tiene estrictos procedimientos para evitar el ingreso de dineros ilícitos y sostuvo que cuando plantea la necesidad de reelegir la seguridad democrática, la confianza inversionista y la cohesión social, también reconoce que busca mejorar aquellos puntos donde hay vacíos, comprometiéndose en mantener los éxitos del actual gobierno.

Vargas indicó que en su campaña, los aportes de personas naturales eran limitados, pero aprovechó la oportunidad para expresar su propuesta de establecer un régimen severo para que a los contratistas se les prohíba serlo si financian campañas, especialmente a alcaldías y gobernaciones. Específicamente, Vargas denunció que los contratistas que financiaron la recolección de firmas del referendo reeleccionista podrían estar haciendo lo mismo con campañas presidenciales.

Mockus explicó que más del 90 por ciento de la financiación de su campaña es estatal y menos del 10 por ciento es particular, dentro de lo cual sobresalen aportes de algunos miembros de la familia Santodomingo y del antropólogo Guillermo Páramo, rector de Universidad Central.

Pardo manifestó que en su campaña no hay ese tipo de aportes, pero no porque esté prohibido. “Ojalá estuviera prohibido”, deseó; “no está prohibido, pero no quiere decir que esté bien”, agregó. Pardo denunció que en Colombia “hay una profesión que se ha desarrollado, que es la de ganar licitaciones, ser contratista del Estado”.

Petro contó que toda la financiación de su campaña corre por cuenta de los anticipos del Estado y que cree en que toda financiación debería ser por ley exclusivamente pública. Denunció que en marzo su equipo pudo calcular miles de millones de pesos en efectivo presentes el día de los comicios legislativos, comprando votos con “dinero untado de sangre y cocaína”.

Sanín sugirió que los aspirantes se comprometieran en un pacto para que contratistas corruptos nunca vuelvan a contratar y manifestó que su campaña se financia en su mayor parte con los anticipos del Estado y en menor manera con préstamos bancarios y del Partido Conservador.

Chuzadas del DAS

Requeridos sobre la actitud que asumirían como presidentes sobre un escándalo como el de las chuzadas del DAS, Vargas consideró que al ver cómo esa institución se utilizó como policía política para perseguir magistrados, políticos y defensores de Derechos Humanos, “resulta imposible creer que eso surgió de funcionarios medios”.

Mockus señaló que la inteligencia no puede reemplazar a la Fiscalía ni a la Policía Judicial, sino que debe buscar que “el gobernante tenga el menor número posible de sorpresas” en temas de orden público y otros. Por eso consideró que la inteligencia que asiste al Presidente siga separada de las Fuerzas Militares. En su opinión, el DAS fue “profundamente desviado de su función”, en lo cual “hay una responsabilidad que la sociedad no le ha cobrado al Presidente”.

Pardo resaltó cómo en este caso, tres entidades como la Secretaría de la Presidencia, el DAS y la Uiaf estuvieron coordinadas para atacar a otra rama del poder y planteó que se trata de “un tema de abuso de autoridad” que “no se arregla con cambio de funciones”.

“Es aún más grave”, dijo Petro. “Los tres delitos que denuncié desde el Congreso”, es decir falsos positivos, chuzadas del DAS y parapolítica, son de lesa humanidad” y para cometerlos desde el poder, declaró, hay que ser permisivo con la mafia y desconocer los principios constitucionales y legales. “Este gobierno destituyó la esencia misma de la Constitución”, sentenció.

Vargas anotó que para que un funcionario como Mario Aranguren se haya metido en eso, “tuvo que recibir presiones de muy alto nivel”.

“Insisto en luchar contra la impunidad”, expresó Sanín, precisando que entre otras cosas, “si no sancionamos a culpables de falsos positivos” y otros delitos atroces, no tendrán vía libre los Tratados de Libre Comercio con Europa y Estados Unidos.

Para Pardo, todo esto deja claro que “el verdadero huevo que quiere conservar la gallinita, es el control de las investigaciones judiciales que ha sido la cola de este gobierno”.


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