lunes, 15 de marzo de 2010

Voto Caribe no llenó las expectativas


LOS 697.133 sufragios que consiguió el Voto Caribe en los ocho departamentos que componen la región, no llenó las expectativas de sus defensores y promotores, pues la meta era alcanzar por lo menos el millón de votos, de un potencial electoral de 5’894.950 de sufragantes.

Aunque se trataba de una votación pedagógica, la jornada buscaba saber si los habitantes de La Guajira, Bolívar, Atlántico, Cesar, Magdalena, Sucre, Córdoba y San Andrés estaban de acuerdo con una región administrativa autónoma, totalmente descentralizada.

La Constitución establece que para decidir la autonomía de una región se puede convocar un referendo popular.

Sin embargo, con la consulta del Voto Caribe, se abre el debate de la conveniencia de una ley de ordenamiento territorial, precisamente para que se reglamente la administración autónoma de las regiones que quieran unirse.

De hecho, uno de los principales retos que tendrá el nuevo Congreso de la República es sacar adelante una ley orgánica de ordenamiento territorial, que hasta ahora no ha sido posible después de 19 años de expedida la Constitución del 91 y que se hayan hundido 18 proyectos sobre el particular en el Legislativo.

Se trata de la segunda norma en importancia en la juridicidad del país, pues debe establecer con claridad las competencias normativas a las entidades territoriales y la distribución de las mismas entre el Estado central y los entes territoriales conforme a los principios de coordinación, concurrencia y subsidiariedad.

Sin embargo, según expertos en el tema, los intereses políticos y burocráticos no han permitido que la iniciativa prospere en el Congreso, aplazando la materialización del modelo de región y las oportunidades que se abrirían para los departamentos afines de establecer alianzas para potencializar sus recursos y sus posibilidades de desarrollo, entre otras.

Por otro lado, los gobernadores de la región siempre defendieron dicha consulta, argumentando un cansancio del centralismo.

"Aquí hay un propósito político que tiene una meta política, que tiene una visión de la organización contraria a la que existe en este momento en el país. Actualmente el país tiene una organización territorial de un Estado central. Nosotros queremos un Estado regional. Esa es la gran diferencia, ese es el propósito político del Voto Caribe" había afirmado días atrás el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa.


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