martes, 2 de marzo de 2010

Jueces acusan a Uribe de fomentar persecución


LA PERSECUCIÓN de la que vienen siendo objeto los jueces del país, y que dejó ayer la más reciente víctima, el titular del Juzgado Primero del Circuito de Soacha, provienen del mal ejemplo que ha dado el presidente Álvaro Uribe y sus distintos ataques a las altas Cortes, dijo el representante de la Corporación de Jueces y Magistrados de Colombia, el fiscal Leonardo Cerón.

“El mal ejemplo provino desde la cabeza, cuando el Presidente de la República empieza a no acatar las decisiones de nuestras Cortes de cierre, cuando desde la cabeza del Ejecutivo se empieza a lanzar ataques mediáticos sobre la administración de justicia, pues ¿Qué se puede esperar del resto de los niveles del poder?”, aseguró Cerón.

Cabe recordar que el presidente Uribe sostuvo un enfrentamiento por un prolongado tiempo con la Corte Suprema de Justicia, debido a la terna para Fiscal General diseñada por él, y la cual siempre fue declarada como inviable, pues a juicio del alto Tribunal los postulados no cumplían con todos los requisitos para dirigir el ente acusador. A finales del año anterior, el roce llegó a improperios lanzados por el primer Mandatario en contra de los magistrados encargados de la elección del fiscal en propiedad.

Según el representante de la corporación que agrupa a jueces y magistrados, hay sectores que quieren salvar su responsabilidad en la pronta salida de criminales de las prisiones sin ser judicializados, “echándole el agua sucia a los jueces”.

Sin embargo, Cerón afirmó que “los jueces no son policías” ni fiscales encargados de las capturas, sino que su responsabilidad es la de defender los derechos de las víctimas y ofrecer las garantías procesales de los acusados.

Este pronunciamiento se da después que varios miembros de la Fuerza Pública, investigados por los falsos positivos, quedaran en libertad por decisión judicial.
Cerón manifestó que cuando el juez otorga la libertad, por lo general, ésta no se debe a una mala actuación de los titulares de los despachos judiciales, sino por errores que se cometen en la etapa previa al juicio, a veces de los fiscales; por lo que los jueces actúan según la Constitución y la ley, y es deber suyo devolverle la libertad al procesado, por vencimientos de términos u otras causas.

Finalmente, el fiscal Cerón reiteró que el asesinato del juez de Soacha, ocurrido en Bogotá, hace parte de una persecución sistemática en contra de los operadores judiciales, lo que entorpece su labor y evita, en algunos casos, que se imparta justicia.


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