El ente acusador pidió juzgar al ex director de Fiscalías de Antioquia por enriquecimiento ilícito desde el 2005, ya que habría incrementado sus cuentas personales a más de 1.200 millones de pesos
DESDE LA cárcel Guillermo León Valencia Cossio estaría confabulando un plan para engañar a la justicia, denunció ayer Ángela María Buitrago, fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia para el juicio que ayer comenzó en contra del ex director de Fiscalías de Antioquia.
Según la funcionaria, y gracias a interceptaciones de llamadas hechas al también hermano del ministro Fabio Valencia, la semana pasada, desde la cárcel, su esposa presuntamente habría elevado derechos de petición a algunas fiscalías para que éste accediera a las pruebas en su contra antes del juicio.
En esas últimas grabaciones, realizadas desde un celular, el hermano del Ministro también habría sostenido conversaciones con el empresario Juan Felipe Sierra, también vinculado a la banda criminal dedicada al narcotráfico de Daniel Herrera, alias Don Mario, en las que reconoció que habría recibido una cuatrimoto a cambio de sacar a alias El Indio de la lista de narcotraficantes.
Por otro lado, la fiscal Buitrago le pidió a la Sala Penal, presidida por el magistrado Jorge Luis Quintero Milanés, que acepte dentro de las pruebas la investigación que se le ha adelantado a Valencia por enriquecimiento ilícito desde el 2005, año en que llegó a la jefatura de las fiscalías, pues hasta el momento sus cuentas personales se habrían incrementado en 1.200 millones de pesos.
Dichas cuentas están basadas en dinero en efectivo, una casa, la hacienda La Elvira (avaluada en 570 millones de pesos) y más de 100 cabezas de ganado, presuntamente provenientes de la banda de Don Mario.
De igual manera, ante la audiencia de formulación de cargos, la Fiscal delegada le informó a la Sala Penal que posee más de 120 llamadas interceptadas a Guillermo Valencia con El Indio, a quien ayudó a salir del organigrama de la banda de alias Don Mario.
En esas llamadas, hechas entre mayo y junio pasados, Valencia se comunicó con el empresario Sierra y con El Indio para concertar el plan para sacar de la lista de narcotraficantes a este último.
La Fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia puso de manifiesto que para este propósito, en las comunicaciones interceptadas el 20 y 21 de junio del año en curso, el acusado programó almuerzos y visitas con altos mandos de la Policía de Antioquia.
Según Buitrago, los contactos de Valencia Cossio con la banda no se limitaron a llamadas, “sino que se tienen pruebas de una reunión entre el alto funcionario con El Indio en Pereira, el 19 de junio de este año”.
De igual manera, la Fiscal manifestó que ya está en trámite el proceso de extinción de dominio de los bienes que recibió el procesado a manos de la banda de narcotráfico, entre los que se encuentran una cuatrimoto avaluada en 40 millones de pesos y 700 millones de pesos en efectivo. No obstante, estas prebendas no han sido embargadas o secuestradas.
Diferencias con Procuraduría
Sin embargo, el Ministerio Público y el defensor de Valencia Cossio, Gabriel Ángel Salazar, no estuvieron de acuerdo con la formulación de cargos por parte de la fiscal Buitrago, por considerar que los delitos no estaban bien tipificados y no había consistencias en hechos y fechas.
El procurador delegado ante la Corte, Julio Ospino, aseguró que el imputado no pudo haber cometido los delitos de concierto para delinquir y favorecimiento en concurso, por cuanto en el primero se deben conocer todos los hechos por parte del sindicado, y en el segundo existe una contradicción.
Ospino dijo que a Valencia se le debe imputar el delito de concusión o cohecho, en vez de enriquecimiento ilícito, por considerar que los delitos deben corresponder al ejercicio de su función pública cuando era director de Fiscalías de Medellín.
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