jueves, 18 de febrero de 2010

Las reformas estructurales se quedaron para el Congreso elegido en marzo: ICP


Los comicios legislativos y luego los presidenciales demandarán tiempo a los actuales congresistas, en desmedro de su trabajo de elaborar leyes.

UN FINAL de legislatura marcada por la campaña electoral es lo que le espera al Congreso entre el 16 de marzo y el 20 de junio próximo. Así lo considera la directora del Observatorio Legislativo del Instituto de Ciencia Política (ICP), Nadya Aranguren. Sin embargo, esto no sería óbice para que salgan adelante algunas iniciativas de gran importancia como es la reglamentación de la Reforma Política.

El propio presidente del Congreso Javier Cáceres señaló al comienzo del primer periodo de esta legislatura que el trabajo se desarrollaría normalmente hasta octubre pasado, pues en adelante los congresistas estarían más pendientes de sus correrías por el territorio nacional buscando su reelección, que de sus obligaciones como parlamentarios.

Sin embargo, un balance de ese primer período de la actual legislatura adelantado por el Observatorio Legislativo del ICP señala que aunque “el Congreso deja varios temas y proyectos pendientes por falta de consenso político o de tiempo para darles el respectivo trámite, se aprobaron y tramitaron proyectos decisivos e importantes para el país. De manera general, de los 451 proyectos estudiados por el Legislativo en este período, entre los que se encuentran tanto los que venían de la legislatura 2008-2009 como los presentados durante el primer período legislativo 2009-2010, 84 hacen referencia a temas de salud pública y seguridad social, 53 son proyectos de conmemoración y homenaje, 48 se enfocaron en propuestas relacionadas con educación y empleo, y cerca de 38 tienen relación con temas de administración pública y de justicia”.

A pesar de que la campaña electoral para el Congreso finaliza el 14 de marzo venidero, cuando será elegido el nuevo Congreso, en adelante quedará la elección de presidente el 30 de mayo, y de ser necesario habrá segunda vuelta en junio. Es decir, la sombra de los comicios estará hasta el final del actual Parlamento.

“En un escenario electoral es evidente que el trámite de los proyectos puede ser mucho más demorado y mientras que el Congreso esté en campaña, la verdad la expectativa de que se tramiten muchos de los proyectos pues es prácticamente ninguna, digamos que como esperando que sea un trámite legislativo lento más marcado por el proceso electoral que por otra cosa”, dijo Aranguren.

Aunque espera que a pesar de la campaña electoral el Congreso no dejará de lado temas como “la reglamentación de la Reforma Política que quedó pendiente y que ya es un hecho que no va a aplicar para estas elecciones, pero sin embargo el proyecto debe seguir el trámite. Existe otro tema que muy seguramente va a sonar y va a tener relación con lo que ha sucedido en los últimos días, es un proyecto de ley radicado por el representante Simón Gaviria y el senador Juan Manuel Galán acerca de una reforma al sistema de salud en el marco de los decretos de emergencia social expedidos por el Gobierno”.

Añadió que también podrían tener espacio algunos proyectos que tienen que ver con acuerdos comerciales que ha firmado el país con otras naciones. Pero la directora del Observatorio Legislativo del ICP considera que definitivamente iniciativas de gran impacto no van a ser tramitadas por el actual Congreso.

Qué le espera al nuevo Congreso

Son muchas las expectativas fincadas en el Congreso que sea elegido en marzo, especialmente teniendo en cuenta que su predecesor estuvo marcado por la mancha de la parapolítica, pues más de 70 congresistas fueron vinculados a investigaciones por este caso.

Aunque la mayoría de los actuales congresistas están aspirando nuevamente, se espera que lleguen caras nuevas con iniciativas que correspondan realmente a las necesidades de desarrollo social y económico del país.

Sobre el particular, Aranguren dijo que la principal expectativa con el nuevo Congreso es que se incrementen “los niveles de credibilidad, la legitimidad y la confianza en los ciudadanos en el Congreso como máximo órgano de representación. Todos esperamos que este Congreso no esté marcado por los escándalos”.

Agregó que en materia de proyectos prevé que el entrante Legislativo acometa el estudio de “reformas estructurales que se requieren para el país en términos tributarios, laborales en términos políticos, que son proyectos que por el escándalo en estos cuatro años no se les pudo dar la viabilidad ni la visibilidad suficiente ni el debate, y son reformas que el país requiere”.

Primer período legislativo

El primer período de esta legislatura estuvo marcado por una notoria concentración en temas de carácter político como el referendo reeleccionista, debates de control político relacionados con escándalos como el de Agro Ingreso Seguro y el comienzo de la contienda electoral que culminará con la elección de un nuevo Congreso en marzo de 2010. El órgano legislativo tuvo a su cargo el estudio de importantes iniciativas en distintas áreas relacionadas con administración de justicia; administración pública y temas políticos; relaciones comerciales y de cooperación con otras naciones y organismos internacionales de los que Colombia es parte; ajustes al esquema tributario nacional y regional; sistema de educación y salud, y modificaciones a la normativa penal, laboral y civil, entre otros temas, señala el estudio que realizó el Observatorio Legislativo del ICP.

Sin embargo luce particular que los proyectos relacionados con homenajes y celebraciones fue el tercer tema más tratado en el primer período de esta legislatura, después de seguridad pública y seguridad social

Añade el informe que varios proyectos de iniciativa gubernamental terminaron su trámite de manera satisfactoria, como es el caso de la prohibición al consumo de la dosis mínima y la permanencia del impuesto al patrimonio. Sin embargo, otras iniciativas de gran importancia para el Ejecutivo no tuvieron el mismo éxito, como lo fue la reglamentación de la Reforma Política y el proyecto que introducía modificaciones al régimen propio del monopolio rentístico de los juegos de suerte y azar.


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