“Todos los que hemos trabajado el tema del Congreso sabíamos que eso iba a pasar: que el referendo, como sucedió hace unos años con la reelección, ha matado todo lo demás”El balance de la actividad legislativa en el primer mes del actual período de sesiones de las dos cámaras “es bastante pobre” y no promete mejorar en los próximos sesenta días, le dijo a EL NUEVO SIGLO la investigadora Elisabeth Ungar, directora de Congreso Visible, programa del Departamento de Ciencia Política de la Universidad de los Andes.
“El balance es bastante pobre, pero predecible”, reiteró la señora Ungar.
“Todos los que hemos trabajado el tema del Congreso sabíamos que eso iba a pasar: que el referendo, como sucedió hace unos años con la reelección, ha matado todo lo demás”, explicó.
La razón de este comportamiento legislativo es que los congresistas “simplemente están respondiendo a la coyuntura del momento, pero están dejando de lado temas fundamentales para el país”, indicó la investigadora.
Pero además resulta, en palabras de la directora de Congreso Visible, que el Gobierno tampoco ayuda con sus “enormes contradicciones”. En ese sentido, la señora Ungar señaló, como ejemplo, que “mientras el ministro invita a la presidente de la Comisión Primera de Cámara a que nombre los ponentes para la reforma política, al mismo tiempo presenta un proyecto de reelección inmediata e indefinida de alcaldes y gobernadores, que va a ocupar también la atención de la Comisión Primera”.
A propósito de la reforma política, para la catedrática de esa iniciativa “lo único que va a quedar es lo de las coaliciones suprapartidistas”, cuando “lo importante es el tema de las sanciones”; pero “eso se va a morir”, vaticinó.
“El resto del periodo de sesiones va a estar dominado por el tema del referendo”, indicó Ungar.
“Hay dos referendos adicionales que de una u otra manera el Congreso va a tener que ponerles atención, porque por ley tiene que hacerlo”, dijo.
“Se viene un periodo legislativo con temas de una enorme importancia, pero que van a quedar totalmente opacados por el tema del referendo, y van a morirse en el camino proyectos de mucha importancia como la reforma política”, explicó la investigadora.
“El balance negativo no cambia con un agravante y es que esta campaña empezó muy temprano y los congresistas tienen otros intereses”, añadió la catedrática.
De mal en peor
A partir de esta semana, el Congreso reanudará sus actividades normales y tendrá tan sólo dos meses de sesiones para evacuar los proyectos que aún continúan represados.
Desde el comienzo del período de sesiones, EL NUEVO SIGLO le preguntó a congresistas y analistas si la atención de los legisladores no iba a estar concentrada en el referendo reeleccionista y la reforma política, de manera que las demás iniciativas pudieran quedar relegadas.
Pues lo que ha ocurrido en el primer mes de sesiones es que ni siquiera el referendo ha avanzado de manera importante.
Mientras tanto, la Comisión Primera de la Cámara aún no ha designado ponentes para la reforma política, lo que motivó una carta del ministro del Interior y Justicia, Fabio Valencia, a la representante Karime Mota, presidente de esa célula legislativa.
Y también hay que añadir los otros dos referendos: el del agua y el de cadena perpetua para los violadores de niños. Este último tendrá que afrontar la competencia con el aumento de penas por el mismo delito, presentado por el ministro Valencia.
Como si fuera poco, el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, radicó el proyecto de Ley Estatutaria de Seguridad y Defensa.
Todo esto y mucho más, tendrá que estudiarlo el Congreso a todo vapor, en un plazo de apenas dos meses.
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